Esperaba leyendo una antología de cuentos de Etgar Keret. El cuento, hablaba de Kissinger, pero no Henry Kissinger. El personaje era una mujer, una no muy segura de si misma. Le pedía a su novio que le demostrara su amor recolectando el corazón de su madre para asegurarse de que la amaba.
Esperaba, que llegaras. Por un momento me transformé en Kissinger cuando me di cuenta que no lo harías.
Pero no, decidí no hacerlo. Me transformé en Holly Golightly y te esperé en la calle, bajo la lluvia (si, llovía). Llegaste, me tomaste de la mano y te besé.