ochocientosonce

Amanece, el día hoy es diferente. Un sentimiento de calor, cerca de mi lado izquierdo en el pecho, me comprime hasta sentir un latido con solo rozar con las yemas de mis dedos. El sol golpea mi cara, que descansa sobre el acolchonado. Siento un apretón en mi mano izquierda, una presión sobre mi cuerpo. Tengo complicaciones para abrir por completo mis ojos en el "interlude", entre el sueño y el despertar, así que solo veo una silueta, que aunque me resulta familiar, me cuesta trabajo reconocer.

Una bocanada de aire, que al parecer es el aliento de la familiar silueta, me hace reconocerte. La inercia se apodera de mis sentidos y puedo decir: te amo, con la facilidad con la que devolví el apretón que se manifestó hacia mi mano izquierda. "Buenos días mi amor", dijiste y desperté a la vida de nuevo.

Manos

Te llamo, no te encuentro. Me llamas, no contesto. Es como si jugáramos a las escondidas. Y me encanta esconderme, pero cómo cuando una película tiene una escena que hace que sobresalte de mi asiento y me resguarde tras de ti. Por fin te encuentro, en un personaje ficticio, pero real, que tu mismo creaste y encarnas.

El más grande

Fueron más de muchos días, pero cuando vi tus ojos se convirtieron en más de muchísimas eternidades, y me sentí segura.

Queco

Y pensar que el futuro es como un panqué el cual no hemos cocinado.

Sabemos los ingredientes, hemos comprado todo, ahora me siento a tu lado, los contemplo tomando tu mano.

Y esque nos costaron tanto, sabemos que será delicioso, como nuestro amor.

Cada ingrediente lo mezclamos en un solo tazón, juntos, vemos como cada uno va integrandose al otro, quedan algunos grumitos, los deshacemos. Pruebo la mezcla, hasta ahora todo es riquísimo. Creo que falta un poco de harina, que le dé consistencia. Listo. Ahora lo ponemos dentro de su molde, hermoso como lo que hemos creado, se acomoda en su lugar.

El horno está listo, el panqué va creciendo con el calor que emanamos.

Y esperamos, y aún esperamos a que esté listo.

Feria

El sonido de las voces es intolerable. La onomatopeya saliente de mi boca conforma un sonido como cuando el viento sopla junto a la ventana: shh.

El personaje frente a la fila de asientos donde están sentados los aprendices de la clase, habla de las maravillas del inicio del cine, sosteniendo un marcador de color rojo. "Intolerancia", la película que explota la utilización del formato del cine moderno. Charles Chaplin, el cine sonoro, "Lo que el viento se llevó".

Desde que llegué no he dejado de escuchar el sonido de las teclas, golpeadas por los dedos inútiles de los que permanecen en el rectángulo inmóvil.

Haikupilación

Mi pluma es rosa

con ella escribo un nombre

y leo, Carlos.

Vengo volando

pues te gustan los buhos

hago un esfuerzo.

Veo borroso

me duele la cabeza

me haré un examen.

Hago una muestra,

una estratificada

conglomerada.

Soy amarilla

y me cubre del frío

de manga larga.

Haikus en clase

me parece aburrida

y esto divierte.

Hoy que llovía

desee que parara

y podré verte.

Tecazacas

Y el lugar no importa. Tu presencia es el tope máximo de la felicidad. Me encuentro en la cima, no del cerro de la Bufa. El viaje, la caminata madrugadora, los desayunos, las noches, los te amos que no son suficientes para lo que siento, el cuarto grande, el chico, el túnel (el real y el literario). El crear inolvidables experiencias; en lo que te haces experto. Hacer que la vida real, sea una vida hermosa y mágica, nuestra meta.

Anteojos

El lugar donde me siento hoy es incómodo.

Afuera del cuarto, veo por a ventana a un tipo volando, boca abajo, con las manos libres moviéndose a favor del aire.

Me siento ahogada.

Te conozco, te admiro, eres extraordinario.

Tanto como fuera de este planeta, un extraterrestre.

Tus pestañas sobresalen del marco del perfil de tu cara, tal como las mías; que no se ven así después de que las manipulo con la pequeña cuchara que usé de bebé para comer papilla.

Y ahora, me siento libre, dueña de mi. Como en un lugar diferente.

Contigo, donde ahora el extraterrestre soy yo.

Artificial

En el cielo claro-azul veo explosiones del tamaño de una nuez. Pero entre las nubes se pierden. "Es raro, son las doce del medio día." Aunque tal vez no lo sean. No estoy segura. Por la noche serían mas evidentes sus colores, el sonido que emiten estaría mas justificado.

Por un momento quise ser una pequeña explosión, del tamaño de una nuez y que mis colores evidentes se escondieran tras las nubes. Pero ahora no es así. Son mis colores los que amas, mi sonido el que sueñas. Y yo solo quiero que me admires, tal vez saldré por las noches, o seré un sonido injustificado a las doce por otros días.

Sentidos

Una mirada, que me explica las mas grandes teorías de la vida.

Una caricia, que hace sentir hasta mi último átomo.

Una palabra, que dice la verdad, descubre la realidad y me lleva a un momento inimaginable.

Un beso, que me lleva al lugar mas íntimo de la geografía.

Una libreta llena de historia, nuestra historia. Que solamente nos hace recordar, porque los momentos están en nuestra memoria.

Palomitas

Un espacio en blanco, para saturar con letras. Y aunque las conozco todas, no se como acomodarlas.

¿Cómo expresar que te amo con tan pocas letras, y con tan pocas maneras de componer palabras coherentes? No queda otra cosa que inventarlas. Nucgsuybfe.

Desconocido

Inconsciente, escribe un conjunto de letras que me llevan a un lugar desconocido.

Gracias, escriben. Aún no se porqué. Tal vez lo sabré en unas horas, días, tal vez semanas lejanas.

Y vuelo mediante una ola de un claro humo con olor a miel. Me gusta la miel, tiene ese sabor dulce, y me recuerda a el olor de un bebé (y no simplemente por el recuerdo del pequeño, sino porque la etiqueta lo presenta).

Recuerdo tus besos, ayer por alguna razón los obvié. Quiero sentirlos, suaves y pasionales. Llenos de amor verdadero.

Redundancia

Espero frente a la puerta. Por la misma puerta por la que te fuiste. Se que vas a regresar, ahora si lo tengo asegurado. Y mi sonrisa no desvanece, porque lo mas seguro de mi vida regresará, por esa puerta. No quisiera ser redundante, pero si me lo permitiera, lo haría con otra afirmación.

Te amo, y así como yo te amo tu me amas. Y nos amamos de tal manera que nuestro amor es la mas grande prueba de que el amor es vigente en estos tiempos.

Orejas

Sigo los pasos de alguien que alguna vez fue un extraño. El momento en que dejó de serlo lo tengo muy presente. Caminaba, con la cabeza baja como un día me acostumbre, seguía las pisadas de él. En algún momento escuché mi nombre, no voltee. Volví a escucharlo, la voz era dulce pero muy firme. Subí la mirada y esa persona extraña no estaba mas frente a mi. Traté de seguir, pero como una pequeña hormiga perdí el rumbo. La voz me llamó una vez mas. Mi mirada sin pensarlo se dirigió hacia mi lado izquierdo. Y lo encontré. El antes extraño, me tomaba de la mano, pero esa mano que antes era mía ahora era de él. Así como mis brazos, mis piernas, mi pecho, mi corazón.

Y cualquier cosa, que antes podría ser solo mio, él lo tomó y lo abrazó como suyo. Ser tu y que tu seas yo, hace que ese día que seguí los pasos de un extraño, se materialice en lo mejor de mi vida.

Tarde:10:20

Me lastimé, me lastima. Pero como una herida común, sanará. La piel por ratos se irrita, se siente diferente, mas frágil. En este momento encontrarte tranquilo creo que no es posible. Ven, abrázame, eso cambiaría todo. Las palabras tendrían mas sentido, las miradas mas significado. Frente a un objeto inanimado creo que no sientes las mías, mis lágrimas, mis caricias.

Y nací así, y si creo que para ti, para hacer que tu vida así como tu la mía, tuviera un significado. Algo por que levantarme cuando caigo. Y si que he caído últimamente, pero es necesario. Creceré, lo prometo, sólo si tu estás ahí, de mi lado. Sin dejar que me aleje un centímetro, sin que me de por vencida.

Te busco a ti, todo el tiempo y aunque aveces te encuentro intranquilo aquí estoy. Y aunque aveces me sientas pequeña y yo me caracterice como tal, soy tuya, tu amor.

La lluvia del cielo

Los rincones de mi boca te aclaman, mis manos tocan el pedazo que dejaste. Ahora te extraño. Y tu olor se desprende cada noche en mis sueños.

Volemos

Hay momentos que nadie conoce, hay lugares profundos irreconocibles para los demás.

Cada cosa, cada segundo, cada uno de mis días. Es tuyo, lo conoces, lo vives conmigo.

Ahora, estamos en un campo desconocido, pero aún así, nos conocemos, sabemos nuestros límites y amamos nuestros defectos.

Estoy contigo, estás conmigo. Nucgsuybfe.

Victoria

La lluvia se confunde con mis transparencias. Y creo verte, pero no, estás a kilómetros y dos horas me distancian más de ti. Las flores me abrazan, una amarilla mas que cualquier otra. Los libros me acogen, sus letras me toman y me llevan a tus ojos. El viaje es largo; lluvia, viento, el sol que araña mi frente. Y estás ahí sentado escribiendo esas palabras que llamaste y me besas.

7:46 am

Ruido, un cuarto lleno de pares de ojos cansados, voces incoherentes, gritando.

"Quiero escribir", grito yo también. Pero las voces no cesan, su nivel es mas fuerte que mi voz, que por las mañanas es frágil. Y después de comer una manzana, mi garganta se cerró.

Una pantalla, tu nombre, invisible. Un baño, tiempo de espera.

Encuentro nocturno

Esperaba en la banca de aquel parque como cualquier otro jueves.

Esperaba leyendo una antología de cuentos de Etgar Keret. El cuento, hablaba de Kissinger, pero no Henry Kissinger. El personaje era una mujer, una no muy segura de si misma. Le pedía a su novio que le demostrara su amor recolectando el corazón de su madre para asegurarse de que la amaba.

Esperaba, que llegaras. Por un momento me transformé en Kissinger cuando me di cuenta que no lo harías.

Pero no, decidí no hacerlo. Me transformé en Holly Golightly y te esperé en la calle, bajo la lluvia (si, llovía). Llegaste, me tomaste de la mano y te besé.

Sol rosa

Vamos encontrando la manera en que mejor nos acoplamos. Y es que con el tiempo me conoces, mejor que nadie. Me gustan los diamantes al ras, no muy grandes, que no griten "Quiero salir y picarle los ojos a la gente". Y que lo acompañen otros pequeños a los lados. Vamos, yo se que a ti te gustan también.

Podemos hacerlo, sin preocupaciones. Porque ayer me di cuenta de que basta una Kiko dona, una coca, una revista para hombres y un buen scouting para saber que el mundo es nuestro y la vida solo para nosotros.

Coraje

El humo del cigarro me pica. No me gusta pensar en lo que podría ocasionarle a mi cuerpo .

Yo también puedo llegar a ser difícil, de entender. Puedo llegar a guardarme muchas cosas sin que afecten mi humor en el momento. Pero por alguna razón eso ya no me gusta. Creo ahora, que la mejor manera de pasar por la vida día a día es, expulsando lo que nos mantiene inquietos, alerta.

Lo aprendí de ti.

El nerviosismo esta por desaparecer, la seguridad sube por la punta de mis dedos. Aún no llega a erradicarlo, pero puedo sentirlo.

Quisiera que pudieras hablar por mi, lo haces tan bien.

Una lluvia de ideas:

... no aparece. Creo que tomare al "toro por los cuernos".

Gracias.

Reencuentro

Quiero contarte lo que siento al leer cada palabra. Quiero vivir sentada a tu lado derecho eternamente. Y me recuesto en mi cama a escribirlo, justo como tu me enseñaste.

Porque que amo encontrarte, y ni siquiera estas ahí. Pero simplemente te pienso y apareces. Detrás de las letras, de las flores "encorchadas", de la obscuridad en la sala de cine.

Y si... esa palabra. Ta!

Cámara celeste

Damos vueltas, sentados, en una silla. Creo que el cielo es amarillo, no se porqué.

Nucgsuybfe. Ta! French Toast!

"Quiero volar, sobre un papalote." dije.

"Al infinito y mas allá". dijiste con tus ojos cafés, llenos de vida futura.

El cielo es amarillo, ahora lo entiendo.

Estrella salpicada de rosa

Es corto el tiempo, indefinidas batallas por llegar a nucgsuybfe.

Él se sobresalta alejándose de esa reacción, sin desear que ella piense que va a irse por siempre.

Ella se arrepiente, solloza, lo abraza, se aleja.

Momento.

Frustración acelerada, multiplicada, inútil.

Sus manos toman su cara, transparencias se filtran entre sus dedos.

La seguridad de sus palabras, opaca cualquier inseguridad que ella pudo tener algún día o el día anterior (si la tuvo).

Otra mas, se van descontando. Al final toda batalla vale por lo que vendrá.

Frente al espejo

En el aire por primera vez, aunque realmente siempre lo hemos estado (en nuestro mundo).

En las nubes (literalmente).

En un lugar familiar para ti, conocido para mi, nuevo para nosotros.

Viejas amistades, personas nuevas a analizar.

Los lugares donde puedo reconocer fácilmente a los turistas.

Los temas difíciles, siempre derrotados por nuestra magia.

Nos faltaron mas de tres días... nunca es suficiente.

Una hora mas por favor, tal vez ¿una cena?

Mesa 19

Quiero constatar, que la noche de anoche fue y es una de las tantas que se suman a nuestro diario aleatorio de días cruciales. Y es que amo nuestras "discusiones" que solo llegan a mis pocas lágrimas; las cuales no se diferenciar porque aveces salen cuando desbordo de felicidad. Tal vez es porque tu dices que cuando llegamos a ese punto, es cuando transpiramos nuestros sentimientos mas intensos y el solo saber que esto es extraordinario hace que mi ser exalte.

Lo mejor de mi vida, esta frente a mis ojos aguosos, mirándome y me dice: "Que bonita te ves".

Ta.

Bolitas de algodón

Es como reconocer tu propio rostro.

Como caminar bajo el suelo que siempre has tocado.

Como saborear esa limonada que haz hecho con seis limones y tres cucharadas copeadas de azúcar.

Como besar la mejilla de tu padre.

Es tan familiar el sentimiento. Pero antes no era real, entonces se intensifica mas de cinco mil veces.

Es como soñar despierta. Tan despierta que lo real es un sueño.

Sube y baja

Amo los días de sol

tomar tu mano

sentados en el pasto.

Conos gratis

Siempre hablamos de los colores, pero son irrelevantes cuando nos escondemos aveces mutuamente. ¿Crees que somos mejores personas cuando estamos juntos? Yo creo que el cielo habla, y maneja a su antojo el destino y que de alguna manera si lo somos, porque si no lo fuéramos, algo allá arriba lanzaría en rayo para mantener una distancia entre nosotros.

Amo las metáforas, pero creo que de lo mucho que las he usado se me están acabando. Aunque pienso que no debe de ser así, ellas, como la vista del cielo desde cualquier punto terrenal, son infinitas.

Encuentro este instante fascinante. El solo hecho de que el sol se mantenga girando a millones de kilómetros sobre mi cabeza, caliente y de energía a cada parte de mi, radiante. El viento que mueve mi cabello de un lado a otro, enredándolo para que después yo pase mis dedos entre los mechones para que yo lo desenrede. Amo el claro sonido de las palabras en el viento.

Y tu, tan fantástico. Que aunque no estás físicamente a mi lado, te siento, cada instante. Irremediablemente, ahora, eres parte de mi. Y no quisiera remediarlo jamás. Intensificas mi existir. Si antes pensaba que la vida no puede ser mejor, ahora tu simple existencia, extraordinaria.

Diezynueve

Me gusta pensar en los colores que combinan. En estar coordinados.

Y es curioso, aunque no vemos los colores igual, de alguna manera siempre lo estamos.

Esa es nuestra filosofía.

Las fotografías obscuras, la llamada junto a los rostros deformados y las sabanas bordadas, la canción fantástica que habla del gusano, el dolor de nuestros pies, nuestros errores del pasado.

Me gusta pensar en los "colores" que combinan.

Armacabezas

La perfección se basa en sentir; tocar, ver, oler, escuchar y saborear.

Al tocarte, siento que toco una extensión de mi piel, que me perteneces.

Al verte me identifico, te veo en mis ojos por el resto de mi vida.

Al olerte, mi vomeronasal te percibe y con la acción básica reconocimiento se que eres tu.

Al escucharte sólo tus palabras me reconfortan y me hacen crecer.

Saboreo los mejores momentos que hemos pasado y que vendrán.

Eso es nuestra perfección.

Un lápiz y un beso

Encontrarte bajo mis pestañas,

ahí, dentro de mis pupilas.

La sensación mas inexplicable.

Quedarme con eso y experimentarlo por siempre,

bellamente intocable.

Leche para beber

El sol no salía, parecía no aparecería.

Me uno a tus labios dentro de una capsula natural que se ubica sobre la ciudad.

Bastaron tus brazos al rededor de mi, unos cuantos pasos de baile y 60 flashes para llamar el sol.

Y el sol mantuvo nuestra energía que se consumió rápidamente por unos instantes.

La calle empedrada no nos impide deslizarnos de esa forma encantadora que solo tu y yo podemos hacerlo. Disfruto tratar tomar su mano sin ver si puedo alcanzarla, y después encontrarla sin ninguna dificultad.

La noche crea el ambiente perfecto para estar los tres bajo el mismo techo, y me siento como en casa.

Yo quería escribir primero...

Revelado

Lo sentía, era como un presente espíritu que se queda atado al mundo mortal. Mi hermana pequeña, quien es mas sensitiva que yo creía que nos seguía alguien. Creo que nos persigue un fantasmita, dijo.

Saliendo de el almacén, soplaba un fuerte aire que me arrastró hasta un lugar; nuestra tienda, bueno, nuestro cajón de estacionamiento frente a la tienda de revelado de fotografías. Había ahí un carro que creí me parecía familiar, pensé que tendría que ser verde, pero no alcancé a divisarlo con claridad, mi hermana mi jaló de la manga del suéter. El hombre que nos trajo nos está esperando en el carro, me dijo desesperda.

Regresé a mi casa con una esperanza guardada en el bolsillo secreto que está dentro de mi morralito. Me despedí del hombre con una sonrisa algo forzada, deseando que fueras tu. Cerré la puerta. Miré la calle por su ojo. Nada.

Cuasi diez y nueve

Y siento el aliento, ese que entra y sale con el ritmo. Mas de veinticuatro horas junto a ese aroma, que se que es parte de mi vida eternamente, porque la naturaleza no se equivoca. Y te extrañaré mas ahora. Quiero, quieres, queremos.

Hacemos listas, de todo. Y siempre nos quedamos donde mismo, me encanta. No es necesario nada más. Solo es para tomar aire, salir al mundo exterior, ese que puede juzgarnos por ahora. Y no me importa no tomar tu mano, ver tus ojos es suficiente para sentirme en contacto contigo.

Ese contacto, el divino. Y mis transparencias justificadas por el sentimiento de felicidad mas real descubierto en el tiempo, en este, nuestro tiempo.

Zapatillas espaciales

Afuera hace frió... creo que estamos a 10º, sigo pensando.

Hablo, todos los días, así siento que esta a mi lado.

El cielo es gris, como el gris de la espuma del mar cuando las olas regresan a su punto de origen.

Solo tengo un par de mangas que me cubren, creo que tus brazos serían mas efectivos.

El dolor constante, ahí, ahí y aveces ahí también, pero la sonrisa siempre, simplemente ahí.

Son las 11:53, espero una sola palabra. Ya se que he tenido mas de 1,837 entre ayer y hoy, pero nunca es suficiente.

No tengo mas que escribir por ahora, siente mis besos.

Amarillo/Verde limón

Las ideas sueltas, no puedo tomarlas y solo plasmarlas en letras.

Amo la idea de nosotros, "Nuestra dinámica" dijiste tu.

Quiero tomar el carrito e introducir cada uno de esos artículos que nos alimentarán eternamente.

Y la vida no puede mejorar ahora, o puede hacerlo, si, pero no por el momento.

Ese momento, en esa área láctea, el mejor de mis 8186.5 días.

Entonces, resumir esa perfecta manera en que mi nariz embona entre tu nariz y tus labios, imposible.

Puntas.

Quería decirlo, pero no encontraba la manera de que el viento que emana mi voz al salir de mi boca no moviera ni un poco tu cabello. Y al final te deshiciste de él. Ahora, eso ya no importa... puedo gritarlo, puedo mover mis labios rápidamente y aún así tu cabello permanecerá donde está, todo el tiempo. Ya no tengo como justificar mi silencio, mi necedad de callar cuando tu hablas.

Comenzaré a hacerte preguntas, dijiste.

Aunque tu cabello es algo secundario, es parte de ti, lo amo. El cabello importa, pero ahora me concentro mas en tus cejas.

Otravez

Me pierdo entre el pasado que está en mi presente y permanecerá en mi futuro.

Pocas palabras. Aún pensando en uno mas para mi lista de días maravillosos. Veremos mañana.

De lunes a domingo

Siempre al salir, tomo una cantidad considerable del puñado de esa esperanza que me regalaste el lunes pasado. Esta vez salí de prisa, creí haberlo tomado. Caminé once cuadras hacia el parque. Cuando llegué a la banca de siempre a contarle historias a las mariposas, lo noté. No tenía ni una pizca de lo que recordaba haber tomado. Te llamé inmediatamente, dijiste que tenías un poco pero que se desmoronaba cuando cerrabas tus ojos.

¡Mantente despierto! dije desesperada. Iré hacia tu casa y te sacudiré hasta el último terrón de esperanza que te quede.

Al llegar, me esperabas afuera, cubierto de esperanza. Con un puñado de sueños y una bolsa de besos. Los cuales tomé y gasté dos en el momento. Los mejores. La esperanza pasa de tus labios a mis labios, pero nunca es suficiente para sobrevivir al final de lo acordado.

Un auto, una cocina y una cama.

Esas ansias, convertidas en besos idiotizan mis pensamientos. Por eso cada vez que hablas me quedo callada. Y mi mente esta ahogada en los recuerdos, en el entorno, en tu "kao".

Sigo pensando que tus ojos son algo así como la perfección de una almendra; dulce pero lo suficientemente fuertes como para aguar mi mirada.

Verte fué, es tan natural. El tiempo no pasa por nosotros, solo tu cabello delata el cambio de las estaciones.

Si, tengo miedo. Nacen de mi esas malas raíces que quiero cortar en el instante. "Plac".

2:14

Me duele mi tronquito, dije un poco insegura.

Y realmente tengo esa sensación de nerviosismo y ansiedad.

El ruido, en todas sus formas, me hace pensar mas claramente.

Son las dos con catorce. Mi almohada me espera.

Kao

Empezaré con las cejas pobladas donde la derecha tiene un lunar en uno de sus extremos. Beso entre ellas cada vez que puedo. Bajo a los ojos, los cuales su forma es parecida a un par de almendras cafés, con largas pestañas.
La nariz ancha, chatita, lo sificientemente grande como para darle un gran mordisco sin hacerle algún daño. A su lado las mejillas, con sus pómulos marcados, donde en la derecha habita otro lunar que pasa mas desapercibido que el café de la ceja. Bajo la nariz , la boca pequeña que calza perfectamente en la mía. (Tus dientes se parecen a los mios.) La barbilla es una perfecta montañita invertida.

Día cinco

Rachas de felicidad, solo rebobino para recordar los buenos momentos. Se extiende hacia los lados mi cavidad bucal. Amo cuando la piel se transforma y tiene una textura diferente agradable al tacto. Los cabellos se erizan. Y siento en el estómago como si el mar, mas salado que nunca, envolviera una y otra vez la arena. Extraño el mar. Creo que amaré el lunes.

La Calle

Y es que comienzo a pensar que todo fué una pesadilla.

Que dormi dentro de mis sueños, y desperté junto a tu boca.

Y lo peor o lo mejor, esque esto me gusta.

La incertidumbre corroe mis palabras. Dia a día. Eso dije ayer,

y hoy lo volvería a decir.

Aliento

Una vez mas... ¿que no dijimos...?

Sabes que al levantar la mirada encontrarás un fenómeno de color; aveces azul celeste, otras gris como tu mirada al alejarte.

Entonces, conoces ese milagro de la vida. Creo que podríamos confiar en que esos pequeños puntos en ese firmamento, pueden alinearse para conspirar en un destino perfecto.

Diminuto

Mis ojitos cafecitos, derraman pequeñitas transparencias porque hace ratito que no te ven. Me tallo mi ojito.

¿Estás llorando?

No, tengo algo en el ojito

Pobrecita. Ve a un espejito a checar. Pon agüita en tu manita y pon tu ojito ahi.

Y lo hice. Pero me ahogue en el agüita, y quise dar un saltito, chiquito.

Pero ni un saltito, chiquitito me ayudó a salir del agüita.

3 Sílabas

Extraño. Extraño tu piel. Extraña relación.

Extraño me pareces ahora, que no tengo tus ojos viendo los mios.

Extraño el momento. Extrañas las palabras. Extraño tus palabras.

Extraño que escribas nuestros momentos. Extraño no escucharlo de tu boca.

Y siempre lo dije; eres extraño.

Sacrificio

Y al encontrarte me di cuenta que lo que he sufrido no es ni al inicio de lo que podría ser suficiente.

¿Cómo no pude darme cuenta?

La soledad que he sentido, no se comprara con lo que podría sentir si es que algún día me pierdo de ti.

¿Cómo es que puedo siquiera pensarlo?

Obscuridad negra, o blanca. Y si lo es, deslumbrante. Tanto lo es que ciega mi percepción ante tu presencia.

¿Cómo fue que dejé de encontrarte?

Cuarto 405

¿Como crear un final de libro perdurable?

Los últimos capítulos fueron difíciles de escribir y es que realmente no quería dejar de hacerlo. Pero sabía que tenía que llegar el final, el cierre. El momento donde la doncella se queda con el príncipe. Pero, ¿qué príncipe? No tenía un príncipe, tenía súbditos, unos molestos súbditos que me seguían a donde fuera. Y si. Ya quería deshacerme de ellos.

Mi príncipe, había pasado ya en su caballo blanco, dijo que regresaría por mi, pero nunca lo hizo. Entonces, ¿que más tengo que perder? Creo que la única manera de desaparecer a los súbditos es buscar un gran final para ellos. Ya lo encontraré. Por ahora esperare a que en el último momento mi príncipe en su caballo blanco, cabalgue hasta mi lugar.

Subconsciente

Y deje de creer...

creer en el bonachón vestido de rojo...

que los hombres no lloran...

que mi vida podría ser peor...

que sus besos eran sinceros...

que no puedo hablar con mi mamá...

que la amistad es fácil...

que nunca me levantaría victoriosa...

que mi sola presencia es suficiente.

Vuela

Inspiración.

Dado el concepto, se pierde el propio significado.

El decir rebuscado, no encuentra lugar para asentarse.

Regresa. Ven y susurra las palabras que formarán los hermosos versos.

11º

No sientes, debajo de esa clara tez
Que a veces es cálida como
brisa de lluvia en primavera.
Donde se esconde un estupefacto ser
que algún día sabía que conocería.

Dolor, infame dolor, crece,
Cual raíz alimentada en el campo.
Se fortalece con tus palabras enraizadas
En el sentido descontento del corazón.

Tonto corazón, tomó la distancia
Como fiel amiga y lo llevó al peor de los desgarres.
Aunque el tiempo le advertía de la difícil caída,
No se dio por vencido estúpidamente.

Cree, en lo más recóndito de sus entrañas,
Ciegamente, como un pequeño que sin más,
Cree en el regordete vestido de rojo de blancos cabellos.

Espera, a retomar ese capítulo inconcluso
De pesadas caricias jamás terminado.
Pero no llegarás, los labios esperan
El último beso, que se repite continuamente.

Frío, difícil sensación, el cuerpo
A flor de piel lo siente a la décima potencia.
Las manos acarician el vacío, que es más fiel
Que la propia idea de ti mismo.

La vuelta

¿Y si quiero viajar en un globo aerostático?,

dije mientras bajaba la cabeza.

Al regresar mi mirada hacia su lugar de origen,

tú me mandaste el beso que me debías.

¿Y si quiero un beso bajo la lluvia?

Jamás debí decirlo.

Te levantaste de la mesa, pagaste la cuenta

y te fuiste con ella.

Huída

La madrugada es fría, con tus palabras me llenas de besos

(quiero de vuelta los míos).

Corremos huyendo de lo que parece imposible de escapar.

Tu, te detienes, contemplas lo eterno.

Me vuelvo hacia ti, tu mirada se llena de diminutas transparencias

que solo se limitan a decir "lo siento".

Regresar de mi mano, casi imposible. Vuelvo a intentarlo, la tomas.

Caminamos mirando las nubes cargadas de recuerdos,

de lágrimas que comienzan a caer a cada paso.

Me detengo, te obligo a hacerlo también.

Mojada, cierro los ojos,

me dejo llevar por el movimiento de aquellas noches.

Los besos, las palabras envolventes, un futuro lleno de luz.

¿Tu mano? Mis dedos incompletos. Abro mis ojos, te haz ido.

19:37

Te estás secando

te doy un hidratante

quiero mi beso.

El sillón del atardecer.

El color es el mismo, solo que lo percibimos diferente. Como todo.

Ahora el tiempo corre, rápido, así lo siento yo. Pero, sorpresivamente, sano conforme el tiempo pasa.

Desear es sólo una excusa para no tener. Y creo que aveces tengo, pero sólo en pensamientos, que es casi relativo al creer.

Hablar o carcomerse. No es una cuestión, es sentido común. Prefiero que las palabras sean devoradas por el sarcasmo o el cinismo que puedes ofrecer. Pero no es así. El dulce sentido de las letras que siempre llenaban ese cuarto, me transporta a los momentos excitantes que me llevan en sus bolsillos.

Hoy el verte es subjetivo, como las manos besuconas que tanto amabas.

0 contra 1,000,000

Cero razones para regresar,

un millón de razones para recordar.

Cero razones para hablar,

un millón de preguntas sin formular.

Cero razones para quedarse,

un millón de razones para olvidarse.