viernes, 8 de enero de 2010

Huída

La madrugada es fría, con tus palabras me llenas de besos
(quiero de vuelta los míos).
Corremos huyendo de lo que parece imposible de escapar.
Tu, te detienes, contemplas lo eterno.
Me vuelvo hacia ti, tu mirada se llena de diminutas transparencias
que solo se limitan a decir "lo siento".

Regresar de mi mano, casi imposible. Vuelvo a intentarlo, la tomas.
Caminamos mirando las nubes cargadas de recuerdos,
de lágrimas que comienzan a caer a cada paso.
Me detengo, te obligo a hacerlo también.
Mojada, cierro los ojos,
me dejo llevar por el movimiento de aquellas noches.
Los besos, las palabras envolventes, un futuro lleno de luz.

¿Tu mano? Mis dedos incompletos. Abro mis ojos, te haz ido.

No hay comentarios: